Canelones de carne picada
Hola, aquí os dejo la receta de mis canelones (bueno, los de mi madre), ya que me lo habéis pedido varias veces, pues allá va.
Ingredientes:
Comenzad poniendo el agua a calentar en la olla más grande que tengáis para que las placas se cuezan bien y no se peguen. Cuando el agua empice a hervir, echad sal y remover y empezar a echar las obleas una a una mientras removemos. Y bajamos el fuego para que las obleas no se rompan (que cueza despacito).
Mientras se cuece la pasta durante 10 minutos, vamos preparando la carne. Sofreimos la carne en una sartén con un poquito de aceite, y le echamos la sal y las especias. Cuando esté sofrita, echamos el tomate frito a gusto. Reservamos.
Cuando la pasta esté, ponemos la olla bajo el grifo y las vamos sacando y colocando en un paño de cocina para que escurra. Las rellenamos con la carne y hacemos los rollitos.
Untamos de mantequilla una bandeja rectangular para horno, y colocamos los canelones.
Cuando está ya todo, preparamos la bechamel, para asegurarnos que no se nos espesa demasiado si la hacemos antes.
Para hacer la bechamel, ponemos en un cazo que no se pegue, las dos cucharadas de aceite y las dos de mantequilla. Cuando esté todo derretido, bajamos a fuego lento y vamos echando la harina muy poco a poco, y removemos con una barilla para que no se formen grumos. Esto es muy importante, si quieréis evitar los grumos. Echamos un poquito de harina, removemos, echamos otro poquito, removemos. Y ya no pararemos de remover hasta el final. Cuando hayamos cocinado la harina completamente, echamos la leche despacito, no la vayáis a echar de golpe que luego os va a costar mucho espesar la bechamel. Vais echando un poquito, moveis, otro poquito, moveis y así hasta echar toda. Y ahora añadimos la sal, la pizca de pimienta y la pizca de nuez moscada. El toque final será poner el fuego al máximo para conseguir el espesor deseado, tampoco mucho, para que la bechamel sea más ligera. Y al subir el fuego no paréis de remover, que sino se os quemará la parte de abajo.
Cuando tengáis la bechamel con el espesor deseado (algo así como la nata de cocinar) la volcáis sobre los canelones. Añadid queso en polvo y unos pegotinos de tulipán, y gratinar al horno.
Veréis qué ricos!! ;)
Ingredientes:
- 400gr. de carne picada ternera o mezcla
- 20 obleas de canelones
- tomate frito
- especias: ajo picado, pimienta negra, tomillo y nuez moscada.
- aceite y sal
- 2 cucharadas soperas de aceite
- 2 cucharadas soperas de mantequilla (os recomiendo tulipán)
- 3 cucharadas de harina
- 1 pizca de sal
- 1 pizca de pimienta negra
- 1 pizca de nuez moscada
Comenzad poniendo el agua a calentar en la olla más grande que tengáis para que las placas se cuezan bien y no se peguen. Cuando el agua empice a hervir, echad sal y remover y empezar a echar las obleas una a una mientras removemos. Y bajamos el fuego para que las obleas no se rompan (que cueza despacito).
Mientras se cuece la pasta durante 10 minutos, vamos preparando la carne. Sofreimos la carne en una sartén con un poquito de aceite, y le echamos la sal y las especias. Cuando esté sofrita, echamos el tomate frito a gusto. Reservamos.
Cuando la pasta esté, ponemos la olla bajo el grifo y las vamos sacando y colocando en un paño de cocina para que escurra. Las rellenamos con la carne y hacemos los rollitos.
Untamos de mantequilla una bandeja rectangular para horno, y colocamos los canelones.
Cuando está ya todo, preparamos la bechamel, para asegurarnos que no se nos espesa demasiado si la hacemos antes.
Para hacer la bechamel, ponemos en un cazo que no se pegue, las dos cucharadas de aceite y las dos de mantequilla. Cuando esté todo derretido, bajamos a fuego lento y vamos echando la harina muy poco a poco, y removemos con una barilla para que no se formen grumos. Esto es muy importante, si quieréis evitar los grumos. Echamos un poquito de harina, removemos, echamos otro poquito, removemos. Y ya no pararemos de remover hasta el final. Cuando hayamos cocinado la harina completamente, echamos la leche despacito, no la vayáis a echar de golpe que luego os va a costar mucho espesar la bechamel. Vais echando un poquito, moveis, otro poquito, moveis y así hasta echar toda. Y ahora añadimos la sal, la pizca de pimienta y la pizca de nuez moscada. El toque final será poner el fuego al máximo para conseguir el espesor deseado, tampoco mucho, para que la bechamel sea más ligera. Y al subir el fuego no paréis de remover, que sino se os quemará la parte de abajo.
Cuando tengáis la bechamel con el espesor deseado (algo así como la nata de cocinar) la volcáis sobre los canelones. Añadid queso en polvo y unos pegotinos de tulipán, y gratinar al horno.
Veréis qué ricos!! ;)
La verdad es que tienen muy buena pinta, Rocío, no voy a tardar mucho en probarlos ;). Y además, el truco de tu bechamel, que a mi se me resiste tanto. ¡Muchas gracias!
ResponderEliminarDe nada, lo he querido explicar todo al detalle para que os salgan ricos y los disfrutéis :)
ResponderEliminar